100 personas. 1600 manzanas. 14.000 árboles caídos.


Da un poquito de bronca comprobar que solo 100 personas asistieron a la amplia convocatoria que realizó la Municipalidad de Ituzaingó a través de su Dirección de Ecología.
Fue la 1º Jornada de Arbolado Urbano realizada en el distrito al cumplirse un mes del fenómeno meteorológico con que la naturaleza y después Edenor se ensañaron con nuestro pueblo.
Estaban la Directora de Ecología Rosa Reviello, la bióloga Silvina Rossi, el Ing. Agrónomo Guillermo Núñez y la Ing. Agrónoma Mercedes Mestre quien vivió muchos años en Ituzaingó. Además asistieron los concejales Daniela Rivas, Mirta Tonelatto, Jorgelina Fitipaldi y Gabriel Jara y el Secretario de Cultura Jorge Piccoli.
La Directora de Ecología bosquejó un panorama de lo que había sucedido con el arbolado urbano arriesgando la cifra de 14.000 árboles caídos y ubicando el fenómeno meteorológico como un tornado F2 que desarrollan velocidades entre 180 y los casi 250 km. por hora que asolaron al distrito durante 4 minutos  con una furia implacable y que según el Ministerio de Asuntos Agrarios nos tuvieron como epicentro.

Reviello recordó que la mayoría de los árboles caídos tenía entre 60 y 80 años y que todavía hay aproximadamente 8000 ejemplares (dentro de los 14.000) que hay que extraer.
Con el lema RECONSTRUYENDO LA CORDOBA CHICA, lema que le gusta utilizar al intendente Descalzo, los técnicos de la Dirección de Ecología municipal destacaron las siguientes especies como sugerencia para reemplazar los caídos: SOFORA, LAGERSTROEMIA INDICA, ACACIA CONSTANTINOPLA, ACACIA BOLA, ACACIA DEALBATO, PALMERA PINDO, JACARANDA, FRESNO AMERICANO Y LIQUIDA MBAR.
Esto motivó la primer intervención de algunos de los vecinos que argumentaban que había algunas especies como la LAGERSTROEMIA INDICA que eran de crecimiento tardío y otras como la PALMERA PINDO que no daban sombra.
En todo momento la arquitecta Rosa Reviello recordó que esta jornada (que estimaba no iba a ser la última) se hacía para que ENTRE TODOS podamos darle un buen curso a las consecuencias del desastre del 4 de abril de 2012; y que era muy importante también el compromiso de todos para cuidar los ejemplares que se iban a ir plantando (obviamente árboles jóvenes).

Adriana Córdoba de COEPSA
El Ing. Núñez recordó que a los paraísos le penetran unos hongos que lo ahuecan, y que lo ideal sería desinfectarlos cuando se poda, porque esa es una de las puertas de entrada a estos organismos tan dañinos; defendiendo de esta manera la posición de un trabajo preventivo, evitando podar.
Por los vecinos intervino el escribano Gastón Di Castelnuovo que ostentó algunos conocimientos arbóreos que nada tienen que ver con su profesión al decir: “Hay que hacer una campaña de concientización para que los vecinos entiendan que LA PODA SIEMPRE ES RESTRICTIVA. Y concluyó: LA SOLUCIÓN NO ES LA PODA.
Por el Barrio Parque El Jagüel hubo un especialista en el tema que comentó de que a los árboles de gran porte hay que tenerles paciencia hasta que superan la altura del cableado, y que hay que aprender a convivir con los árboles porque muchos sirvieron de barrera para que el tornado no se llevara nuestras casas.
La Ingeniera Agrónoma Mercedes Mestre recordó que los que plantaron estos árboles hace 80 años lo hicieron para que lo disfrutaran otros y recalcó: “lo que hagamos hoy es para que lo vean y disfruten las futuras generaciones”.
Si tomamos este razonable punto de vista estaríamos ante la presencia del PRIMER ACTO DE GOBIERNO DE DESCALZO COMENZADO PARA QUE LO VEAN A LO DISFRUTEN A LO MEJOR NUESTROS NIETOS, aunque haya sido a raíz de las consecuencias del tornado y no antes.
Adriana Córdoba por COEPSA, entidad de Ituzaingó de reconocida trayectoria por la defensa del medio ambiente argumentó: “hay que tener la responsabilidad de ser un Municipio Ecológico como a muchos les gusta nombrarlo. Para eso la Dirección de Ecología debería TENER UN PRESUPUESTO ADECUADO. Acá se habló de 14.000 árboles caídos… pregunto: ¿cuántos árboles tiene Ituzaingó?, que recibió la siguiente respuesta de un empleado de Ecología de la Municipalidad: EL RELEVAMIENTO QUE ESTABAMOS HACIENDO, NO SE CONCLUYÓ.
Y continuó Adriana Córdoba: “se han perdido muchos árboles por el viento del 4 de abril pero también por el lobby inmobiliario que nos tiene acostumbrados en Udaondo a permitir la tala a veces indiscriminadamente”.
La Ing. Mestre arriesgó: “los árboles de Parque Leloir y Villa Udaondo están controlados, yo trabajo en el área que los registra”. Fue respondido en forma directa por un miembro de COEPSA: “En nuestro barrio se extrajeron 84 árboles de gran porte para hacer el Barrio Cerrado María del Parque y la Municipalidad no hizo absolutamente nada”.
Intervinieron vecinos del Barrio Parque El Salvador (antes el Campo de los Curas) denunciando que ellos querían poner árboles en el barrio pero que habían colocado unas palmeras que fueron robadas; por eso venimos acá para ver qué va a hacer el Municipio. (Rosa Reviello les propuso una reunión).
La gente de PLAC (Parque Leloir Asociación Civil) apoyó el listado de árboles sugeridos por la Municipalidad y Hernán recordó: “los eucaliptus de Martín Fierro ayudaron a que el viento no avanzara sobre el resto. Cuantos más árboles tengamos más protegidos vamos a estar”.
Por su parte, nuestro poeta Vicente Pugliese con sus 92 años, defensor de los árboles también se expresó: “Vine a qué me digan cuál es el árbol que lastima, cuál es el árbol bonito, cuál es el árbol que ya está para el aserradero. Vine a qué me den las normas”.
Por el Barrio San Antonio una vecina dijo: “yo me acabo de enterar que estamos en un Municipio Ecológico. A mi me parece que antes de decidir qué árboles poner, sería importante saber cómo lo vamos a cuidar. Sueño con ver el cielo a través de los árboles, sin cables aéreos.
CONCLUSION:  Cuando un 9 de julio hace 5 años nevó todos nos pusimos contentos por el hecho histórico. A nadie se le hubiera ocurrido que la naturaleza se iba a descargar con tanta furia en Ituzaingó. Pero pasó y no estuvimos preparados.
No se trata de juzgar las actuaciones del gobierno municipal. Sabemos que al Intendente nunca se lo vio tan angustiado y preocupado, PERO NECESITAMOS ALGO MÁS.
Es hora de que sepamos cuántos árboles tenemos, de qué especies y en qué estado fitosanitario se encuentran. Lo único que sí sabemos ahora es cuántos han caído.
También es tiempo que los vecinos que vinimos a vivir a Ituzaingó porque tiene características especiales nos demos cuenta que SON ESPECIALES POR LA CANTIDAD Y VARIEDAD DE ARBOLES que hasta el 4 de abril de 2012 teníamos. Es hora de sumarnos y que en la próxima Jornada de Arbolado Urbano seamos muchos más, porque una respuesta de un vecino cada 140 árboles caídos es muy pobre.